Reseña: Interpol /// Interpol

Mon, Oct 4, 2010

Discos, Reseñas

Interpol
Interpol
Arts & Crafts México
6.9

Por Marco Avré @Moody_

Podría afirmar con toda seguridad que la parte más disfrutable de una pregunta es cuando se encuentra la respuesta. Interpol, la cuarta entrega de esta banda neoyorquina, es precisamente una serie de preguntas que al parecer nunca llegan a obtener una respuesta concisa, por lo menos no dentro de este álbum, y tomando en cuenta que es el último en el que tuvieron a Carlos D. en su alineación, dudo mucho que la encontremos en alguna entrega posterior.

Probablemente, la inclusión de un nuevo miembro, será lo que reavive la esperanza de volver a escuchar a un Interpol fresco y con ganas de hacer música. Por ahora, las canciones suena desgastadas y en algunos casos forzadas. La voz de Paul Banks parece salir con mucho esfuerzo mientras sus letras son un lamento lleno de preocupación, que seguramente tienen que ver con la edad y el tiempo que llevan en el escenario.

El disco abre con una confesión que preocupa a quienes tienen intenciones de seguir escuchando nuevo material de Interpol: “I have succeded, I won’t compete for long” en “Success”, mientras que las siguientes canciones “Memory Serves” y “Summer Well” apenas muestran destellos de lo que Interpol solía hacer por allá de principios de los 00s. No es hasta “Barricade” donde encontramos al Interpol brillante con los ritmos y las guitarras, la belleza discreta del bajo de Carlos D. y lo que más se extraña en este álbum: la fuerza en las letras y en la voz de Banks.

Para la segunda mitad del disco, todo cae en picada, y las canciones parecen repetirse una y otra vez. Es como si hubieran tomado “The Lighthouse” la canción encargada de cerrar el Our Love to Admire (2007) y hubieran hecho la mitad un álbum basado en esa sola canción.

Y aún incluso en este vórtice de lamentos, se nota la calidad con las que Banks y compañía hacen cada una de sus canciones, todas tienen la delicadeza de una artesanía cuidada hasta en el más mínimo detalle: las distorsiones en la guitarra son exactas, las notas, ahora largas de Paul Banks tienen la duración ideal y la batería tiene un peso mayor que en anteriores producciones, haciendo de este cuarto disco una amalgama de mucha calidad aunque poco disfrutable.

Lo más decepcionante de este álbum es que no llega a ningún lado. Interpol no ha perdido la calidad que los caracteriza, sin embargo, la madurez de la banda suena más bien como un desgaste y las preguntas establecidas en este álbum no encuentran un desemboque digno de un disco de Interpol. Tan es así que “The Undoing” cierra el disco con un fade out donde el sonido simplemente desaparece y a muchos no nos deja rogando por escuchar más